ÁNODOS DE ZINC

El zinc es el material más propicio para su uso en aguas salobres o agua de mar. También se utiliza para enterrar en suelos de baja resistividad, así pues, es idóneo para proteger los cascos de los barcos que navegan en aguas saladas, para estructuras offshore o cualquier estructura metálica en electrolitos de baja resistividad.

Debemos tener cuidado al utilizar el zinc ya que en temperaturas altas (T> 60ºC) el zinc invierte su polaridad haciéndose catódico frente al acero.